Poeta senza tempo

Aroma frutal, un eco de infancia,
recuerdo aquel dulce que despertaba
nuevas sensaciones, tan puras, tan vivas,
como el primer asombro al probar la miel.

Su presencia es calma, es paz y es brisa,
un susurro leve que todo serena.
¿Sabe el universo por qué su esencia
despierta en mi alma un latir sin tregua?

Oh musa, como Perséfone en sombras,
reina entre mundos, luz y misterio,
así mi mente se agita y se enreda
cuando en mis versos intento nombrarte.

Es un Big Bang de emociones y sueños,
un estallido que todo lo enlaza.
Podría escribir hasta el alba eterna,
pero, ¿cómo atrapar lo infinito en palabras?

Aroma frutal, un eco de infancia,
recuerdo aquel dulce que despertaba
nuevas sensaciones, tan puras, tan vivas,
como el primer asombro al probar la miel.

Su presencia es calma, es paz y es brisa,
un susurro leve que todo serena.
¿Sabe el universo por qué su esencia
despierta en mi alma un latir sin tregua?

Oh musa, como Perséfone en sombras,
reina entre mundos, luz y misterio,
así mi mente se agita y se enreda
cuando en mis versos intento nombrarte.

Es un Big Bang de emociones y sueños,
un estallido que todo lo enlaza.
Podría escribir hasta el alba eterna,
pero, ¿cómo atrapar lo infinito en palabras?

Aroma frutal, un eco de infancia,
recuerdo aquel dulce que despertaba
nuevas sensaciones, tan puras, tan vivas,
como el primer asombro al probar la miel.

Su presencia es calma, es paz y es brisa,
un susurro leve que todo serena.
¿Sabe el universo por qué su esencia
despierta en mi alma un latir sin tregua?

Oh musa, como Perséfone en sombras,
reina entre mundos, luz y misterio,
así mi mente se agita y se enreda
cuando en mis versos intento nombrarte.

Es un Big Bang de emociones y sueños,
un estallido que todo lo enlaza.
Podría escribir hasta el alba eterna,
pero, ¿cómo atrapar lo infinito en palabras?

Aroma frutal, un eco de infancia,
recuerdo aquel dulce que despertaba
nuevas sensaciones, tan puras, tan vivas,
como el primer asombro al probar la miel.

Su presencia es calma, es paz y es brisa,
un susurro leve que todo serena.
¿Sabe el universo por qué su esencia
despierta en mi alma un latir sin tregua?

Oh musa, como Perséfone en sombras,
reina entre mundos, luz y misterio,
así mi mente se agita y se enreda
cuando en mis versos intento nombrarte.

Es un Big Bang de emociones y sueños,
un estallido que todo lo enlaza.
Podría escribir hasta el alba eterna,
pero, ¿cómo atrapar lo infinito en palabras?